Un día como hoy, pero de 2002, circulaban los últimos coches de la legendaria Compañía Río de La Plata S.A. Había sido fundada en 1947 y durante décadas creció a lo largo del país. Operando la línea 129, rutas de larga distancia y una empresa de viajes estudiantiles, fue una de las empresas de transporte más grandes del país en la década de 1980. En los 90 comenzó la debacle, terminando esa década muy endeudada y con un deterioro general en sus servicios. La usura de algún concesionario le otorgó créditos impagables y eso fue lo que terminó de hundir a la empresa. El 24 de septiembre de 2002 se dictó su quiebra, sin embargo algunos coches continuaron prestando servicio hasta el 4 de octubre, día en el que se apagó para siempre una historia de 55 años.
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